El sentimiento siente a uno, no es uno el que lo siente. El sentimiento se hace verbal y es ahí que se establece un parámetro del sentir. Ese sentir se hace irreal, adopta una engañosa forma: la palabra. Las palabras son el ocultamiento de la realidad, y nada hay en la realidad más real que el sentir. Yo no amo, la palabra me hace amar. Yo siento, pero ni siquiera sé si sentir existe porque ya lo escribí.